24.10.03

Por cierto.
Platicando con mi amigo Neto, de la ciudad de Cambridge, Mass., me enteré que Elliot Smith comenzó su carrera como músico callejero. En Boston. Vías públicas, estación del tren, el estuche de la guitarra en el suelo, el tipo del saco polvoso y la voz impregnada de aguardiente, las solapas levantadas, un gorro de nieve, la mirada distante, perdida en la rola improvisada en medio de la muñidiza culta y serena de la ciudad que vio nacer a Edgar Allan Poe.