5.7.07

el silencio es importante. el silencio es la cosa menos importante del mundo. creo que lo importante son las pausas. beber café es igual de automático que respirar en estos momentos. el silencio hoy lo es todo. me gusta ese estado de conciencia, ese estado de ser. se escuchan bonito los teclados de esta computadora. son teclados finos, delicados, apenas los tocas y ya imprimen esa no-imagen en el monitor. la escritura es un proceso de llenar de ruidos el silencio de la página en blanco. odio ese cliché, pero me salió de repente. bretón era un imbécil, si cree que nosotros creemos en su escritura automática. probablemente la escritura automática es el estado de ser de nuestros días. nos hemos convertido en escritores diferidos de nuestro propio mundo. ¿qué escribimos? información, datos registrables en una base estadística que define lo especializada que es nuestra vida. comparto espacio (y silencio) con posiblemente 344,897 escritores que en este momento, estos precisos nanosegundos, pretenden con todo el peligro que esto conlleva, dedicarse a escribir. y no me refiero a quienes postean blogs solamente. me refiero a ese otro grupo de ilusos, los que detrás de su ordenación de palabras colocan una suerte de manto sagrado que llamamos "oficio". Es bien fácil pretenderse escritor. Bien fácil desprenderse de ese espanto que causa la imposibilidad de proclamarse escritor sin recibir de uno mismo una suerte de escarmiento. ¿Me sigo riendo cuando me dicen que soy escritor? Sí. Pero también guardo silencio. Sorbo otro traguito de café y prosigo con mi vida. Invento al personaje innombrable al que le construyo un innombrable destino. Lo veo al final del camino (ahí, donde puede encontrarse devastado, extasiado, en condición sublime, supina, resuelta, histérica) y él me observa como quien observa a un viejo amigo.
Es difícil mantenerse callado.
Me pregunto algo. Mexicali es una ciudad que nos mantiene refugiados en tiempos de calor. Muchos de nosotros, raptados de nosotros mismos, salimos a la calle sólo cuando se debe, y regresamos a nuestros pequeños laboratorios, para confeccionar creaciones que caen en el anonimato. Me pregunto si entre los escritores que tienen la inquietud por leer este blog, están haciendo lo mismo: enclaustrarse en sus refugios, confeccionando locuras. Quisiera saber qué hacemos mientras en silencio nos mantenemos. Por el calor, pues. Por el calor preferimos no salir a la calle, así que nos encerramos y leemos, escribimos, tenemos resoluciones existenciales y demás. Me pregunto y quisiera saber si entre los que leen este blog hay quienes están creando algo. En silencio.
Si alguno de ustedes se encuentra en esas circunstancias, me gustaría saberlo.
Un saludo desde el silencio.